Hola queridos y queridas,
Hoy hablamos de una familia de plantas con numerosas especies diferentes pertenecientes a distintos géneros, la mayoría son originales de zonas tropicales del Continente Americano aunque también existe alguna especie viviendo en el Continente Africano, hablamos de las Bromeliáceas.
Pueden ser terrestres o vivir sobre rocas pero la gran mayoría de las Bromeliáceas prefieren zonas forestales en hábitats de nieblas y nubes cargadas de humedad, son epifitas, es decir, les gusta vivir sobre ramas y troncos de los árboles sin ser parasitas, las hojas y sus raíces de anclaje condensan y absorben la humedad ambiental y evitan desecarse gracias a una capa cerosa que las recubre.
Existe tanta variedad en esta familia que su tamaño puede variar de los 5 centímetros a los 10 metros. En su medio natural las flores mas llamativas atraen a aves e insectos que a cambio del néctar ayudan a su polinización. El nombre de esta familia es en honor al botánico sueco Olaf Bromelius. La Bromeliácea mas conocida y cultivada es la piña o anana, fue introducida en Europa por Cristóbal Colón en el siglo XV. Los primeros dibujos botánicos de estas plantas aparecieron en el siglo XVII.
Una de las características principales de las Bromeliáceas son sus hojas que se abren de tal manera que ayudan a recoger el agua de la lluvia o la humedad ambiente en su zona central, pueden ser muy variadas largas y anchas de colores llamativos y variegados o estrechas acintadas. Sus flores son muy llamativas y la mayoría con la característica común de que solo florecen una vez en su vida aunque pueden durar varios meses.
En jardinería las Bromeliáceas se distinguen por el atractivo destacado de su follaje y por la extravagante, llamativa, diversa y exótica forma de sus flores de distintos colores que varían del blanco al rojo, purpura, amarillo, o anaranjado. Son muy utilizadas en los jardines de invierno cerrados o en terrarios con trozos viejos de árboles cortados a medida, se llaman árboles de bromelias.
Aunque se pueden sacar al exterior en los días de lluvia cuando las temperaturas lo permiten las Bromeliáceas se caracterizan por ser plantas de interior en zonas con inviernos duros. Son perfectas para decorar ambientes modernos y combina con otras plantas consideradas de interior como ficus o fílodendros. Además son habituales en tiendas de flores formando arreglos florales o individualmente.
Por su origen tropical uno de los mayores errores y peligros para las Bromeliáceas es el exceso de riego que pudre sus raíces. La humedad ha de ser alta y cálida, se debe mantener el sustrato húmedo y tiene que estar muy bien drenado, los riegos han de ser moderados una vez a la semana en verano y cada 15 días en invierno con agua tibia o templada sin cal, el agua fría les perjudica. Se pueden poner debajo de la maceta piedras o guijarros con agua que no toquen la base del recipiente y además permiten que sus hojas se pulvericen con agua sin cal.
Las Bromeliáceas crecen muy lentamente durante la primavera y el verano y pasan a un descanso invernal en los meses mas fríos. Le gusta un sustrato con bastante materia orgánica, prefieren tierra ácida y porosa que permita la circulación del aire en el sustrato, se le puede combinar a partes iguales turba con mantillo de hojas, corteza de pino triturado y arena de grano gruesa. Tenemos la posibilidad de fertilizar con guano liquido o fertilizante para orquídeas una vez al mes desde primavera a otoño.
Necesita mantener unas temperaturas cálidas que no bajen de los 10º y no superen los 30ºC, el calor de las calefacciones no les conviene ya que reseca la planta y la marchita, debemos ubicarlas lejos de ellas, a las Bromeliáceas les gusta la luz intensa pero no soportan la luz directa del sol.
Se pueden reproducir por semillas pero este proceso es lento y tardan en florecer unos 4 años. La mejor manera de reproducir las Bromeliáceas es por los nuevos hijuelos que desarrolla la planta durante y después de su floración, los nuevos retoños pueden florecer después de un año. Estos rebrotes se separan cuando midan alrededor de un tercio de la planta madre.
En algunos casos los hijuelos de las Bromeliáceas se pueden separar con la mano pero en otros casos debemos utilizar un cuchillo afilado, es preferible recogerlos con raíces desarrolladas, debemos trasplantar a una maceta de forma que la base quede en la superficie y mantenerlo en un lugar cálido y húmedo. La planta madre puede seguir produciendo mas retoños.
CONSEJOS:
Si ponemos trozos de manzana y los tapamos con un plástico en el sustrato se induce a las Bromeliáceas a florecer.
Evitaremos los productos abrillantadores en las hojas de las Bromeliáceas.
Si aparecen manchas negras en la parte inferior de las Bromeliáceas es por el exceso de riego.
Estamos ante una familia de plantas fascinante que nos dará un valor inmenso para desplegarlas a largo plazo en el interior de nuestros hogares, como siempre os deseo….
Arroyomolinos, 14 de Diciembre 2020.
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